Escribe:
Hugo Fidel Sacor
Antropólogo
24 de marzo de 2017
Algunos datos históricos acerca de la Semana Santa en Guatemala. Las ceremonias de la Semana Santa o Semana Mayor tuvieron su origen en la Iglesia de Jerusalén. Los cristianos primitivos seguían los pasos de Jesucristo por los sitios recorridos por él. De manera que, la iglesia adoptó dicha liturgia desde sus orígenes y dispuso que todas sus iglesias celebraran los oficios de dicha semana de la misma forma que en Jerusalén. (Misal Diario y Vesperal, 1940:422).
La Semana Santa se ha celebrado en Guatemala desde hace muchos años. Constituye una festividad implantada con la conquista, al igual que las demás festividades religiosas. Adquirió mayor importancia durante los años en que la capital del Reino de Guatemala se encontraba en el valle de Panchoy, especialmente a partir de la segunda mitad del s. XVII. Los cronistas Fuentes y Guzmán, Francisco Vásquez y Francisco Ximénez han dejado constancia del esplendor con que se realizaban algunas de las procesiones en la época colonial, tal es el caso de las procesiones de Jesús Nazareno de la Merced y del Señor Sepultado de Santo Domingo.
Según informa Luis Luján Muñoz, para la Semana Santa de 1774 el gobierno únicamente autorizó que las procesiones desfilaran por sus atrios. Menciona también que el año siguiente, 1775, se efectuó la procesión de la Reseña, y que el Viernes Santo del mismo año por la mañana, salió una procesión de Penitencia, desde el templo de la Merced hasta la Plaza mayor y de allí regresó a la iglesia. Añade que lo mismo sucedió en los años de los terremotos de 1777 y 1778, hasta que el presidente Martín de Mayorga dispuso su traslado a la nueva ciudad, el 5 de julio. La imagen es trasladada a la Nueva Guatemala de la Asunción el 7 del mismo mes (Luis Luján Muñoz, 1982:53-54).
Otra de las procesiones importantes que se efectuaban en la ciudad de Santiago de Guatemala (hoy Antigua Guatemala) era la del Calvario, que también fue trasladada a la nueva ciudad. La procesión de Jesús Nazareno de la Santa Cruz del Milagro fue trasladada al templo de San José en la Nueva Guatemala.
Una de las imágenes más populares de la Semana Santa es la de Jesús Nazareno de la iglesia de Candelaria. La procesión de dicha imagen se originó en el barrio de Candelaria, situado en las inmediaciones del cerro llamado del Manchén, en Santiago de Guatemala, habitado por indígenas dedicados a oficios tales como albañilería, carpintería y fundición. En dicha iglesia, dedicada a la Virgen de Candelaria, se rendía culto a una imagen de Jesús Nazareno, que debió ser esculpida en la segunda mitad del siglo XVI, atribuida al escultor Mateo de Zúñiga.