Elaborado por:
Lic. Max Araujo
Ex Viceministro de Cultura
Experto en Legislación Cultural
Guatemala es un territorio de 108,889.00 kilómetros cuadrados, con un rico y variado patrimonio cultural: material o tangible, representado por bienes muebles e inmuebles de las épocas prehispánica, colonial y republicana, e inmaterial o intangible, representado por las expresiones culturales, entre ellas las artísticas y las tradicionales de cada región, de cada comunidad, de cada etnia, de cada período de nuestra historia y de cada uno de los cuatro pueblos que forman el país: maya, garífuna, xinca y ladino o mestizo.En la actualidad se afirma que somos un país multicultural, multilingüe y multiétnico. Declaratoria que se hace con base en la realidad social y por lo establecido en los preceptos constitucionales, otras normas jurídicas y los acuerdos de paz. Estos acuerdos pusieron fin a un conflicto armado de treinta y seis años, y cuyo texto final se firmó el 29 de diciembre de 1996. Somos un país multicultural, por la cantidad de expresiones culturales que se manifiestan o practican. Multilingüe porque se hablan veinticinco idiomas: 22 de origen maya, el garífuna, el xinca y el español. Este último sigue siendo el oficial y cumple una función de puente entre hablantes de las otras comunidades lingüísticas, aunque por la ley de oficialización de idiomas se puede usar el idioma local en actividades públicas, oficiales y de enseñanza.
Ya se cuenta con políticas nacionales de cultura, creadas en el año 2000, y actualizadas en el 2015, mediante procesos participativos entre representantes de diversos sectores y de los cuatro pueblos, en las que se reconoce la trascendencia de nuestra diversidad cultural, del patrimonio cultural y la necesidad de su salvaguardia. Estas políticas también reconocen de la importancia de las expresiones de todos los tiempos de los pueblos indígenas y de su contribución a la formación de la Guatemala contemporánea. El desarrollo de estas políticas ha generado un Plan Nacional de Desarrollo Cultural a Largo Plazo.
En un trabajo para el Ministerio de Relaciones Exteriores (Política Cultural en el Marco de la Política Exterior, y su Plan de Acción, 2012), el consultor cultural Julio Solórzano Foppa sostiene que la estrategia para la formulación de una política cultural internacional de Guatemala debe partir de un conocimiento de la riqueza cultural y su enorme potencial tanto como instrumento de la política exterior del país, como generador de riqueza y empleo, como promotor de la imagen de Guatemala y también para el enriquecimiento de la propia cultura al ponerse en contacto con otros países y otras culturas.
Solórzano Foppa afirma que la imagen que se tiene en este momento de nuestro país es negativa por los hechos de violencia, de impunidad, exclusiones, racismos, por tener uno de los índices más bajos de desarrollo humano lo cual se contrapone al hecho que también se nos conozca por la belleza de nuestra geografía, por nuestra biodiversidad, por productos agrícolas y comerciales que exportamos, o por Tikal, por la Antigua Guatemala, la cultura maya o por la obra de nuestros grandes artistas.
Lamentablemente en la balanza de nuestra imagen pesa más lo negativo, lo que no significa que no vengan un poco más de un millón de visitantes extranjeros al año. Si bien es cierto, nos dice Solórzano, que Guatemala tiene ante si enormes retos para resolver sus grandes problemas, también es cierto que el país podría hacer un mejor trabajo de promoción de sus aspectos positivos como lo son su cultura y su naturaleza.