Escribe:
Marco Tulio Monzón
Gestor Cultural
20 de marzo de 2017
Sin duda alguna, muchas personas que dedican su talento artístico en una especialidad particular, no solo brindan un aporte al arte, sino que convierten su trabajo en un apostolado y además devuelven a su patria algo de lo obtenido, por medio de reconocimientos dedicados a quienes en su diaria labor tributan sus mejores esfuerzos para la cultura y el arte.
Uno de ellos es don César Augusto Gómez Rubí, quien desde hace muchos años ha creado el “Libro de Oro”, con el cual ha brindado un reconocimiento a aquellos artistas y gestores del arte y la cultura, que a su buen parecer, han aportado mucho al país, en búsqueda del desarrollo social a través de la promoción y difusión de las diferentes expresiones que conforman nuestra identidad cultural
Encomendado especialmente por el señor Gómez Rubí, me ha tocado en suerte hacer entrega al licenciado Maximiliano Araujo y Araujo, de un “Libro de Oro”, con el que se hace homenaje a uno de los más significativos representantes de la cultura guatemalteca, tanto a nivel nacional como internacional.
Escritor, abogado con especialidad en legislación cultural y administrador cultural tanto en su papel de asesor de ministros, como en su actual cargo de Viceministro de Cultura del Ministerio de Cultura y Deportes, el Licenciado Araujo recibió este significativo reconocimiento, en su despacho en Palacio Nacional de la Cultura, el día 16 de marzo.
Es para mí, una honra haber sido emisario del reconocimiento y buenos deseos del Señor Gómez Rubí, que con este homenaje rinde tributo a uno de los más reconocidos valores de la cultura, según sus propias palabras.
Fue emotivo para el Lic. Araujo haber recibido este Libro de Oro, lo que agradeció, expresando que la tarea de un funcionario público es la de servir a la sociedad, en este caso en el ámbito de la cultura, lo que considera no solo una obligación, sino una satisfacción, al ver tanto trabajo realizado en aras de la cultura.
Mi agradecimiento por el honor de haber sido portador de este obsequio, y al mismo tiempo también agradecido por haber dedicado a mi persona, un libro similar, por la labor que humildemente he realizado desde varios espacios culturales.
Salud y mucho bienestar para don Cesar Augusto Gómez Rubí, por estos dos significativos homenajes.